Cómo dañar una tarjeta SIM

Las tarjetas del módulo de identidad del suscriptor, o SIM, son pequeñas tarjetas de datos que se utilizan en teléfonos basados ​​en frecuencia GSM en todo el mundo, como las redes AT&T y T-Mobile en los Estados Unidos. Las tarjetas SIM almacenan la configuración de red y la información de un proveedor de red móvil junto con la información personal del usuario en la tarjeta. Puede ser necesario dañar o destruir una tarjeta cuando una tarjeta se haya quedado obsoleta y se haya reemplazado o si el propietario de la tarjeta cambia a una red diferente. Toda la información se almacena en el chip ubicado en la parte posterior de la tarjeta. Dependiendo de la cantidad de daño, es posible que un chip dañado no funcione en un teléfono.

Paso 1

Coloque la tarjeta sobre una superficie sólida y golpéela con un martillo. Un traumatismo por fuerza contundente puede hacer que la tarjeta sea ilegible y mantenerla físicamente intacta.

Paso 2

Rompe la tarjeta en dos. Use ambas manos para doblar la tarjeta de un lado a otro hasta que quede en dos partes. Si el área del chip de la tarjeta no está dañada, la información personal de la tarjeta aún podría leerse, pero una tarjeta rota dificultará la lectura en la mayoría de los teléfonos.

Paso 3

Sumerja la tarjeta en un vaso de agua salada. El agua salada es altamente corrosiva para el metal y la viruta metálica se degradará lentamente si se deja en el agua durante un largo período de tiempo.

Paso 4

Cortar el chip con unas tijeras. Cortar el chip en varios pedazos destruirá, no dañará, un chip, pero asegurará rápidamente que la información de la tarjeta no se pueda leer.

Consejo

El metal utilizado en los chips SIM no tiene propiedades magnéticas, lo que significa que los imanes no dañarán la tarjeta SIM.