Cómo hacer antenas WiFi caseras

Las antenas de redes inalámbricas se pueden fabricar en el hogar utilizando elementos simples y cotidianos y un mínimo de conocimiento sobre la física de las antenas. Dos tipos principales de antenas, la direccional y la omnidireccional, se relacionan con la dirección y la intensidad del patrón de onda transmitido. El ingeniero de jardín promedio puede construir una antena Wi-Fi casera en aproximadamente una hora.

Paso 1

Decidir sobre un uso para la antena. El tipo direccional puede reflejar señales a una gran distancia, pero tiene un ángulo de desviación que restringe el ancho de la señal a unos 30 grados. Esta antena se usaría para comunicaciones de larga distancia, pero no funcionaría bien como transmisor principal de un punto de acceso local. La propagación generalizada y de corto alcance se puede enviar mediante un "palo", una antena vertical que lanza su señal en todas las direcciones, o mediante una antena omnidireccional.

Paso 2

Retire el asa en la parte posterior de la tapa de la sartén. Esto probablemente expondrá uno o dos orificios en la parte posterior de la tapa, que se pueden usar para pasar el cable de la antena. Si este agujero no está disponible, perfore uno cerca del centro.

Paso 3

Monte la antena estándar del equipo Wi-Fi (nodo) en el centro interior de la tapa de la bandeja. Esto hará que la forma de onda de la antena se concentre y se refleje en una dirección. Se han utilizado muchos reflectores diferentes, como latas o tubos metálicos. El plato parabólico será generalmente mejor para el constructor aficionado porque tiene un ángulo de señal más amplio.

Paso 4

Monte la antena Wi-Fi completa en un receptor y pruebe la señal. Se sabe que algunos platos más grandes envían una señal de hasta nueve millas en condiciones ideales.

Consejo

Usar un reflector para cualquier antena concentrará y mejorará su señal.

Advertencia

No te pares frente al plato mientras esté activo.