Repare o reemplace su unidad de aire acondicionado averiada:6 factores críticos a considerar

Es una vieja pregunta:¿cómo saber cuándo un equipo ha superado su vida útil? ¿Puedes hacer que tu unidad vieja dure un par de años más si la arreglas o tendrás que seguir invirtiendo dinero en ella? Las unidades más nuevas son más eficientes energéticamente y pueden reducir su factura de electricidad, pero ¿qué pasa con el costo inicial?

Una de las razones por las que esta es una pregunta tan común es que no hay una respuesta simple. Hay muchos factores a considerar al tomar esta decisión. Probablemente sepa que algunos proveedores de servicios intentarán venderle un nuevo sistema cuando el anterior solo necesita una reparación simple. Otros proveedores que ganan dinero con las llamadas de servicio repetidas pueden alentarlo a seguir reparando una unidad que se ha convertido en un pozo de dinero. Entonces, ¿cómo puedes decidir? Considere lo siguiente:

1. La antigüedad de la unidad.

La mayoría de las unidades de aire acondicionado comerciales ligeras están diseñadas para durar entre 15 y 20 años en condiciones óptimas. Muchos factores pueden reducir esa vida útil "típica", incluida la mala calidad del aire en una gran ciudad como Nueva York y la exposición a los elementos de una unidad en la azotea. Si su aire acondicionado tiene más de 10 años, y especialmente si está expuesto a condiciones adversas, puede que no valga la pena invertir mucho en reparaciones en ese momento.

2. Condición e historial de servicio.

El cuidado del equipo tiene un gran impacto en la vida útil de una unidad de aire acondicionado. ¿Se ha mantenido y limpiado regularmente de acuerdo con las recomendaciones del fabricante desde que se instaló? Si es así, la mayoría de las piezas pueden estar en buen estado, incluso si el sistema tiene más de 10 años, y es menos probable que la unidad siga fallando.

3. Lo que está roto.

Cuando se trata de una solución simple, como una conexión eléctrica, la reparación es probablemente el camino a seguir. Pero si el compresor falla, especialmente en una unidad más antigua, es hora de reemplazarlo. El compresor es uno de los componentes clave del sistema, y ​​la inversión para arreglarlo a menudo no vale la pena. Además, los compresores a menudo fallan debido a problemas secundarios, por lo que si reemplaza el compresor, es probable que encuentre otro problema en poco tiempo. Las fugas de refrigerante también son un problema complicado, especialmente en un sistema más antiguo que tiene corrosión en las bobinas. Encontrar la fuente de múltiples fugas puede llevar mucho tiempo y ser costoso, e incluso una vez que las solucione, un sistema más antiguo puede continuar desarrollando más fugas. En este caso, es probable que el reemplazo sea la opción más inteligente.

4. Costo de operación.

Probablemente haya escuchado que los acondicionadores de aire más nuevos son más eficientes energéticamente y pueden reducir su factura de electricidad. Es posible que no se dé cuenta de cuánto puede ahorrar y qué tan rápido esos ahorros pueden compensar el costo de los nuevos equipos. Consulte estos recursos para calcular cuánto puede ahorrar:

  • HVAC OpCost
    Calculadoras de ahorro de energía de ENERGY STAR

5. El factor verde.

También hay cuestiones ambientales en las que pensar al tomar una decisión de reparación o reemplazo. ¿Se siente culpable tirando la vieja unidad en un vertedero cuando podría sacarle un poco más de vida? Algunos contratistas reciclan equipos viejos, así que asegúrese de preguntarle a su proveedor sobre esa opción si el reemplazo parece ser la opción adecuada para usted. Además, además de consumir menos recursos energéticos, las unidades actuales utilizan refrigerantes más ecológicos que no agotan la capa de ozono.

6. Factor de comodidad.

Si su sistema ha estado instalado durante un tiempo, y especialmente si la ocupación y el uso del edificio han cambiado, es posible que la capacidad y la ventilación de su sistema ya no sean adecuadas para el espacio. Si este es el caso, si repara su unidad anterior, seguirá teniendo variaciones de temperatura e incluso problemas de calidad del aire. Si experimenta puntos calientes y fríos, problemas de humedad, olores e incluso informes de síntomas de "edificio enfermo" por parte de los ocupantes, el reemplazo es probablemente el camino a seguir. Luego, su contratista puede evaluar el uso, la capacidad y la ubicación de su unidad y equipo de ventilación, aumentando los niveles de comodidad en su edificio.

Consulte con expertos en los que puede confiar

Si se encuentra en una situación de reparación versus reemplazo, asegúrese de consultar con una empresa de HVAC como Arista que se encarga tanto de las reparaciones como de las nuevas instalaciones. Los expertos que hacen ambas cosas no tienen motivos para guiarlo hacia una opción u otra en función de su propio interés. Después de una inspección de su equipo, obtendrá una evaluación del problema, la condición y la eficiencia energética de su equipo, y un consejo en el que puede confiar. Tendrá la información que necesita para tomar una decisión informada.

Para obtener más información sobre si debe reparar o reemplazar ese equipo HVAC, descargue una copia gratuita de nuestra Guía de reparación o reemplazo.